¿Qué más decir?

Últimamente no tengo mucho tiempo. El trabajo y otras actividades, así como la preparación de un nuevo vídeo sorpresa, me están quitando mucho tiempo.

Hay tantas cosas que contar: la obsesión de los progres con las penas de muerte en EEUU (olvidándose de que el primer y segundo lugar mundial en penas de muerte está ocupado por China y Cuba, respectivamente, con un número anual que supera las cifras de EEUU en decenas de años); la aprobación de la LOE, esa vergüenza nacional, defendida por la señora Carmen Calvo, la ministra más paleta de todo el plantel, cuyos oscuros intereses no pasan, desde luego, por mejorar la enseñanza en España; las más de 500.000 firmas recogidas por la COPE en apoyo al manifiesto de los nueve; la obsesión de Gregorio Peces Barba (el pescado más podrido del mercado) de ir contra las víctimas del terrorismo; la nula capacidad de negociación (una vez más) de Moratinos y Zapatero en la Unión Europea; la nueva "ayuda" del ministro corrupto Montilla a Gas Natural, obligando a las industrias a pagar más a partir de 2006, además de hacer que los usuarios paguemos también un incremento del precio del gas y la electricidad por encima del IPC; la estúpida campaña progre con el Prestige y la Guerra de Iraq (la conclusión que saco es que, para el Prestige, hubieran hecho lo que hubieran hecho, siempre habría estado mal para los progres, cosa obvia; para la Guerra de Iraq, la conclusión es que las muertes que ha provocado el ejército español -según se desprende de las fechas que indica el artículo del panfleto prisaico El Pais- tuvieron lugar durante el gobierno Zapatero; así que ¡¡ZAPATERO, ASESINO!! ¿Gusta ver las pancartas al revés, cuando hay datos para ponerlas al revés y no del derecho?)...

En fin, hay tantas cosas que pasan a diario y tan poco el tiempo, que no consigo ponerme al día.

Ruego a mis pocos lectores que me perdonen, pero la espera merecerá la pena. Traeremos unas cuantas sorpresas estas Navidades...

Sorpresas de las gordas.