Bye, bye, Piqué

Una alegría que me llevo al cuerpo hoy. Me levanto con la noticia de la dimisión de Piqué y me confieso aliviado por la marcha de este personajillo que ha ido cosechando cada vez peores resultados en Cataluña y que inexplicablemente seguía calentando el sillón de la jefatura del PPC.

Ignoro los movimientos internos dentro del partido que le ha mantenido en el frente político durante los últimos 10 años. Ignoro cómo es posible que el PP "fichara" a este personaje que con apenas 33 años aterrizó en la jefatura de Ercros, empresa a la que llevó a la suspensión de pagos siendo su consejero delegado y presidente. Sí, esa misma Ercros que ya anuncié que era un frente oculto del nacionalismo en esta guerra de OPAs y sobre la que nadie ha dicho absolutamente nada. Total, un licenciado en economía más jugando a ser mayor cuando sólo había pisado las tarimas de la Universidad de Barcelona y las de la Generalidad (con un gobierno de Pujol, cómo no). ¿Usted pondría su vida en manos de un cirujano teórico? Yo no, la verdad. Y desde entonces a Piqué se le tiene una tirria y un asco en Cataluña superior al que le tienen a otros dirigentes del PP. Porque Piqué, además de chaquetero, no ha demostrado nada en su vida. Y de ahí, para ministro. ¡Qué cosas hacía Aznar, oiga! ¡Qué ojo clínico para los recursos humanos! ¡Y Piqué echándole a todo lo que se mueva, sea Pujol o Aznar, él al sillón!

No, no me gusta Piqué, lo reconozco y su dimisión supone una alegría. Obviamente, el escorpión quiere dar su último aguijonazo cargando contra Ángel Acebes, pero el dimitido se equivoca, pues es el Secretario General un personaje bastante más apreciado que su persona. Y eso es algo que los ególatras que hablan a saltitos (vaya, en esto me recuerda a ZP) no pueden aguantar.

Por cierto, me parece interesante el apunte que da Vidal-Quadras: "la dirección de campaña la nombra directamente la dirección nacional y todo parece indicar que se trata de un primer paso para marcar una inflexión en el discurso y el mensaje de la campaña de las generales en comparación con las anteriores". También podemos leer algunos apuntes de sus declaraciones a RNE aquí.

Ahora se habla de Daniel Sirera y de Alberto Fernández como posibles candidatos al puesto. Yo personalmente preferiría a una persona de la calidad de Alejo Vidal-Quadras (queremos leerte más, no abandones tu blog), una persona de una enorme calidad comunicativa y con las ideas muy claras (vamos, lo opuesto a Piqué). Y al igual que opina Anghara, yo pienso que también Alicia Sánchez Camacho (a seguir escribiendo) es candidata al sillón.

En fin, lo dicho, que el hecho de la dimisión me parece positivo (Piqué no deja de ser un nacionalista acomplejado); el momento, según algunos no lo es tanto, pero en mi opinión, cuanto antes mejor. Y la mejor señal de que esto es bueno, es cómo lloran los socialistas (Piqué el del sentido común, sí, sí, como lo leen; y Montilla lo lamenta, ay, qué penita) y nacionalistas (ERC llora la "españolización" del PPC, la monda).

Qué pena de "oasis" catalán, que pierde a su mascota.

Actualización

Muy bien Rajoy recordándole a Piqué que "la política no es fácil". Muy bien. Los niños mimados a la porra.

Y que Gallardón diga que no se debería de prescindir de "ese activo tan importante" y que guarda una buena amistad con Piqué lo dice todo. Me reafirmo en mi opinión.