Concentración de la AVT en la Puerta del Sol

Hoy a las 12 del mediodía ha tenido lugar la enésima concentración/manifestación de la AVT en contra del terrorismo. Hoy hemos oído las doce campanadas en la Puerta del Sol a causa de la necedad del presidente Rodríguez y del odio y de la inquina de sus amigos batasunos, responsables de 19 heridos, 2 muertos y todo un aparcamiento de la terminal 4 del aeropuerto de Barajas hecha añicos (cuyo factura de reconstrucción, dicho sea de paso, jamás se pasará a sus verdaderos deudores, las alimañas etarras). Sabemos que "oficialmente" hay dos personas desaparecidas, aunque ya se les da por muertos. Por supuesto, no esperen que Rubalcaba comparezca a cada hora, como hacía Acebes tras el 11M, porque eso de "información al momento" sólo se puede pedir "a los de siempre"; a la progresía burguesa que aposenta sus nobles partes en los escaños gubernamentales, no, porque ellos "son guays". Rajoy pide esa información al gobierno (que ya sabemos que no dará; buenos son estos para "dar", como no sea por donde siempre nos dan a los contribuyentes) y Astarloa insiste una vez más con el Pacto Antiterrorista (que recordemos firmó el mismísimo Zapatero mientras ya negociaban en secreto con la ETA; pacto que, dicho sea de paso, comprometía a ambas partes a no negociar nunca más con la banda de alimañas terroristas ni con sus amigos de parranda).

Así que, convocados de nuevo por la AVT, miles de españoles nos hemos congregado en la Puerta del Sol de Madrid para gritar que estamos hartos de terrorismo, de negociaciones con los asesinos y de gobiernos blandengues que evitan decir la verdad y que sólo saben rendirse ante los terroristas, pero nunca hacer caso al pueblo. ¡¡ZAPATERO, DIMISIÓN!!

Ya sabrán que el presidente Rodríguez habló ayer de "suspensión de la negociación", un término que, en contra de lo que opinan algunos periódicos y el propio Rajoy, no es nada ambiguo, pues significa exactamente lo que significa, que lo mantiene en suspenso, es decir, aparcado temporalmente. Algo en suspenso no está acabado. Así vemos en el DRAE, que "suspender" quiere decir, entre otras cosas, "Detener o diferir por algún tiempo una acción u obra". Más claro, agua.

Pues aquí no se acaban las tonterías. El candidato-que-no-lo-intuía para la alcaldía de Madrid, Miguel Sebastián, no ha tenido mejor ocurrencia que emitir estos sonidos por su desconocida garganta: "Ánimo, que no van a poder con nosotros, y no van a amargarnos la Nochevieja". Por supuesto, Pepiño Blanco, ese ectoplasma de la política y de la dialéctica, ha vuelto a echar las culpas al PP. Yo lo de este "ser" es que no puedo entenderlo. Sueña con el PP. Aparte de todo, enfermizamente obsesivo. Por supuesto, no esperen de alguien que insulta a una persona por el mero hecho de ser enfermo y que no se disculpa que razone por sí mismo.

Y para rematar, la guinda del presidente de la comunidad vasca, Ibarreche (también conocido como Ibarrulo o Iba-erre-hache (negativo, por supuesto), se ha puesto la chapela de pensador lítico y ha esculpido un discurso navideño cargado de contrasentidos a la lógica, a la decencia y a la realidad. Padece de la misma enfermedad que ZP o Franco, la obsesiva pronunciación de la palabra "paz": "no podemos permitir que el proceso de paz se desmorone". ¿Ah, no? Supongo que dos muertos son un magnífico acicate para que el gobierno zetapesco alce sus plegarias a su laico cielo y empiece a pronunciar de nuevo sus palabras mágicas: paz, y con talante... Pero, ¿esta gente qué bebe? ¿Piensan que toda la población es idiota? ¿Acaso piensa el ladrón que todos son de su condición? Pues se equivocan, para nada estimados políticos, se equivocan y mucho. Cada vez que ustedes levantan una ceja, miles de españoles decentes nos volvemos a preguntar por qué tenemos que sufrir el calvario de aguantar su jeta granítica y su salario estratosférico.

Después de este pequeño discurso (gracias para aquel se lo lea entero), os pongo algunas fotos de la concentración de hoy, 31 de diciembre de 2006, en la Puerta del Sol, en contra del terrorismo etarra, en contra de la negociación del gobierno socialista con la ETA y a favor de la libertad, la dignidad, la memoria y la justicia.