EL BRINDIS DE ODÓN

Tras el anuncio del alto el fuego de ETA el miércoles 22 de marzo, el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, brindó por "la paz" y por el ccomienzo de un "ojalá" proceso de paz. Libertad Digital

En el Consistorio descorcharon botellas de champán (¿o se trataba de cava catalán?) para brindar también por los que el edil llamó "ausentes involuntarios". Menudo calificativo ha escogido este personaje para los miles de víctimas de una banda terrorista. Libertad Digital

¿Se refiere a gente como Melitón Manzanas que fue asesinado cobardemente por la espalda a manos de un etarra en presencia de su mujer y su hija? ¿O a Miguel Ángel Blanco, que fue ejecutado por trabajar por amor a su país y su pueblo y por poner entre la espada y la pared al gobierno? ¿O a Fermín Monasterio Pérez que fue asesinado también por la espalda mientras trabajaba en su taxi? ¿O a Francisco Tomás y Valiente, asesinado a traición mientras hablaba por teléfono en su despacho de la UAM? ¿O a los cientos de víctimas anónimas de Hipercor que cometieron el terrible delito de ir a comprar ese día? ¿O a los asesinados en la Casa Cuartel de Zaragoza? ¿O a los cientos de supervivientes de atentados cuyas secuelas psicológicas no les dejan vivir tranquilos? ¿O a todas esas familias que han tenido que salir de las Vascongadas por miedo a sufrir extorsión, secuestros y amenazas?
El señor Elorza debería medir más sus palabras. Todas estas personas ni son "ausentes", porque están vivas en la memoria de todos, y mucho menos "involuntarios", más bien "forzados" u "obligados".

Con esta afirmación, este señor (?) está justificando los asesinatos de todos estos españoles. Y, personalmente, como potencial víctima de ETA, me siento ofendida, atacada, humillada y muchas cosas mas. A ver si nos enteran de una vez de que con las víctimas no se juega.